viernes, 30 de julio de 2010

La llave...

Papá me preguntó… ¿hija te puedes quedar con mi mamá, que la tía debe viajar a Valparaíso?, respondí conforme Sí Paaa no hay problema... Son contadas esas veces que tal confianza me depositan, cuidar a la abuela es más paciencia que atenderla, y yo sí que la tengo, así que prepare la mochila y partí a dormir allá, la verdad es que me gustan sus historias y su ritmo de vida... Llegamos y Papá le preguntó ¿viste tele hoy?; ¡No! respondió ella, no la necesito... y después argumenta… ¿Para qué verla sí después se me olvida lo que sale en ella? mejor no pierdo mi tiempo...

Desperté en la mañana después de una heladísima noche, y me dice ¿Y usted cuando llegó? sonreí y le explique: mi papá me vino a dejar ayer... Aaah dice tratando de hacer memoria, ¿y hasta cuando se queda? insiste, hasta que llegue la tía… Entonces siéntase como en su casa…

Seguía la mañana y me dice, Oiga va a tener que ir a comprar pan, así que vaya no más..
Ya pues le dije yo y me abrigue porque el frío de la capital está terrible... Le pregunto al darme cuenta de que mi papá no me había dejado las llaves... ¿Abuela las llaves del portón? Y su cara expresa la incertidumbre… Ni idea, me responde...Aah mi memoria y se queja, eso es lo triste de llegar a vieja, completa, ¡no me acuerdo de nada!, trato de aliviar su pena que empieza a aparecer, y le digo pero tranquila abuela, yo te ayudo a buscarla... Empezó la búsqueda en la antigua biblioteca, a ver si había alguna copia por ahí que la tía tiene de reserva, pero nada.

Nos fuimos a su pieza, y empezó a buscar en sus cajones, y en eso mira la repisa, me dice: ¡Aquí está! Vea cuál de las dos sirve... Las miro y quedo perpleja, tuve que respirar profundo y aguantar la risa, le dije… No poh wely, éstas no sirven, deben ser de algún cajón, o algún ropero, era de esas llaves viejas, de esas largas y con figuras detalladas en su comienzo, y típicas de alguna reliquia, o cofre de joyas, algo así se me imagina, la cuestión es que insistió con que esas eran, y yo sabiendo que no lo era, seguí buscando, de pronto dice, " A los porfiados hay que dejarlos" Y partió con su lento y singular paso hacia el portón, se agacha y trata de hacer que la llave entre en la cerradura, vio que no era, pensé yo "verá que la otra es igual", pero en eso va y con la misma convicción trata de meter la segunda llave. Derrotada dice: "Chita
no era nah..." Y parte a seguir su búsqueda... Mientras yo, siguiéndole los pasos, me reía tratando de entender, cuál era el antiguo portal que mi abuela quería abrir…

martes, 27 de julio de 2010

Pájaros Prohibidos...

Los presos políticos uruguayos no pueden hablar sin permiso,

silbar, sonreír, cantar, caminar rápido, ni saludar a otro preso.

Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres

embarazadas, parejas, mariposas, estrellas ni pájaros.

Didoskó Pérez, maestro de escuela, torturado y preso "por

tener ideas ideológicas", recibe un domingo la visita de su hija

Milay, de cinco años. La hija le trae un dibujo de pájaros. Los

censores se lo rompen a la entrada de la cárcel.

Al domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de árboles. Los

árboles no están prohibidos y el dibujo pasa. Didoskó le elogia

la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen

en las copas de los árboles, muchos pequeños círculos entre las

ramas: - ¿son naranjas?¿qué frutos son?- La niña lo hace callar:

-ssshhhhh- y en secreto le explica: - bobo ¿no ves que son los

ojos? Los ojos de los pájaros que te traje a escondidas.


(Eduardo Galeano)

lunes, 19 de julio de 2010

A Iván...

"De tres hermanos el más grande se fue por la vereda a descubrir y a fundar y para nunca equivocarse o errar iba despierto y bien atento a cuánto iba a pisar... " (Silvio Rodríguez)

"Recibiré postales del extranjero tiernas y ajadas, besos, recuerdos. ¿Cómo están todos? Te hecho de menos. Cómo pasa el tiempo...
Seremos otros, seremos más viejos, y cúando por fin me observe en tu espejo, espero al menos que me reconozcas, te recuerde al que soy ahora..." (Ismael Serrano)

Dime cuánto tiempo ha pasado ya, mira que he pérdido la cuenta, esa mañana fue fría, triste y ópaca, la verdad es que recuerdo bien cómo me aguantaba las lágrimas, ya era la segunda despedida que hemos vivido juntos, pero no pensamos que esta sería por tanto... ¿Recuerdas las cartas que llegaban a Natales? Las escribía con la esperanza de que recuperaríamos el tiempo perdido, esa distancia me bastó para entender quiénes eramos, esperaba ansiosa tu regreso para esta vez escribir la historia con otro color, otro lápiz y en nuevas hojas...

Llegaste y pasaron un par de años, que no fueron como los planeamos, pero ahí estuvimos.. Siguio pasando el tiempo y esto se volvía más increíblemente inesperado...

Ese verano dijiste me voy, y me reí... ¡Qué díficil es esta historia! ... Sinceramente no quería seguir escribiéndola ni menos viviendola...

Pero recuerdo el brillo de tus ojos con una nitidez triste y nostálgica, y no puedo evitar preguntarme... ¿Seguirán brillando de esa manera? Y tu sonrisa... esa que me gustaba tanto... ¿la tendrás aún?, ¿o se habrá quedado en un vaso? Es díficil no recordarte, y no sentir este entramado de emociones mal fundados cuando te veo, a miles de kilometros y viviendo en un tiempo distinto, perdona si soy bruta con las palabras, pero me es confuso, son millones las emociones que tengo respecto a ti, algunas deseadas, otras que me dan ganas de arrancarlas...

Dejáme decirte que te he pensado tanto estos días, trato de entender tus pasos, trato de entender tus risas, y trato sobre todo de recordar momentos plenos a tu lado.. .sé que los hay pero me cuesta encontrarlos... Y dejáme decirte que estoy bién, qué siento que con los enanos he hecho un buen trabajo... Al menos lo estoy haciendo, así que tú tranquilo, Hermano...Sigo creciendo y luchando, y te digo que no rendiré fácilmente, he aclarado las cosas, y quiero más que nada... Seguir siendo tu orgullo...

... Te Amo!